Los arquitectos tenemos ideas con dimensiones y/o proporciones. Aunque suene extraño que una idea tenga esas cualidades en los arquitectos tiene que estar inherente en ellos. Cuando nos dicen para hacer un proyecto uno ya lo esta pensando y lo tiene que hacer con medidas aun así el cliente no haya terminado de explicarle, ya uno tiene una idea mas memos clara de lo que hará. Por eso debe uno que imaginarse ya con medidas que puedan ser reales y dejen de ser solo ideas. La Arquitectura se tiene que hacer respetando dos leyes.
Una de ella es la gravedad, ya que si no se le hace caso tu estructura colapsaría, no se puede hacer un techo sin columnas que luchen eternamente con la gravedad y ahí es donde se crea el espacio, ya que uno ordena las estructuras en base a resistir la gravedad dándole una forma determinada a tu obra. Y el otro es la luz que construye el tiempo. Cuando uno ve que la obra con el transcurso del tiempo no cambia, las paredes no se mueven, las estructuras no cambian ni nada que sea referido a la obra, lo que si esta en constante movimiento es la luz y con ella cambia el espacio a travez del tiempo. La Arquitectura empieza sus medidas a partir del hombre, porque la Arquitectura es para el hombre y todas las proporciones son en base a las medias del hombre. Así como la música necesita la audición para que pueda llegar al hombre, en la Arquitectura se necesita
la vista, aunque también se puede utilizar mas sentidos. Las medidas de las cosas, la proporción, son algo que ningún arquitecto debe dejar al lado.
Una vez un alumno del reconocido Mies Van dier Rohe, le objeto que porque esa obsesión de las medidas de la casa Farnsworth y el le hizo una apuesta de que su casa entraría por el Panteón de Roma, obviamente Mies tenia muy claro las proporciones de cada obra y sabia que entraría. Así Mies enseño a sus alumnos que las medidas es algo esencial en la Arquitectura enseñándoles una gran lección que los libros no te enseñaran nunca.
Modulor- Le Corbusier
El modulor es un gran ejemplo de proporción cuando hablamos de proporción a partir del hombre con proporciones áureas y permitiendo miles de combinaciones armónicas.
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